Verónica La tecnología ha cambiado la vida de Verónica por completo.

"Ha pasado de ser una niña pequeña sin medios para mostrarnos lo que sabía, a ser una niña que tiene un aparato portátil con el que puede reír, jugar y relacionarse", dice su madre Sam Rospigliosi, de Edimburgo, Escocia.

"Quién sabe, quizás lo use para hablar en los próximos años, en el caso de que nunca aprendar a hablar de nuevo".

Adentrarse en sus pensamientos

Verónica tiene seis años y sufre un autismo severo. Tiene grandes problemas para aprender y le es enormemente difícil relacionarse socialmente. Perdió su habilidad de hablar a los tres años.

Pero al igual que otros niños como ella, las computadoras de pantalla táctil le han proporcionado una forma de comunicarse.

Aparatos como los iPads se han convertido en un fetiche casi obligatorio para las familias con niños que sufren autismo.

Richard Mills, director del departamento de investigación del Research Autismo y el National Autistic Society, dice que la tecnología nos da la oportunidad de "avanzar un paso más en nuestro entendimiento del autismo".

"Nos permite adentrarnos en el modo en que el niño piensa".

"La gente con autismo tiene un tipo distinto de inteligencia. Su memoria visual es fuerte, por lo que las computadoras son muy motivadoras", señaló.