Ante las sanciones aprobadas el pasado 09 de marzo contra Venezuela, Rusia acusó a Estados Unidos de querer torcer el brazo de la patria de Bolívar ejerciendo presiones políticas.
A través de una nota de prensa, el Gobierno
ruso expresó su preocupación ante tal situación, ya que esto representa
un nuevo intento de desestabilizar a Venezuela, y por ende una amenaza a
la democracia de parte de América Latina.
“Advertimos con preocupación el
aumento de las tendencias negativas y de la situación desestabilizadora
en la República Bolivariana de Venezuela”, señala el comunicado.
Por lo que el Ministerio de Exteriores ruso resaltó la amistad y alianza estratégica que une a Moscú y Caracas.
De igual manera, confirman la
firme solidaridad con el pueblo de Venezuela y sus dirigentes elegidos
legalmente, por lo que demuestran un “decidido rechazo ante cualquier
tipo de acciones violentas y golpes de Estado como método para desbancar
a gobiernos legítimos de Estados soberanos”, reitera el boletín oficial.