Ganglios linfáticos humanos Científicos en Estados Unidos diseñaron unas pequeñísimas cápsulas que pueden simular la función del sistema inmune para reforzar la respuesta del organismo a infecciones.
Las "nanopartículas" sintéticas están dirigidas a los ganglios linfáticos, la parte del sistema inmune que se encarga de reconocer y combatir los agentes foráneos que atacan al organismo.

Los ganglios linfáticos están distribuidos en todo el organismo y lo que hacen estas nanopartículas, explican los investigadores del Centro Médico de la Universidad de Duke, es "avisar" al sistema inmune cuando hay una amenaza externa, como un germen o una infección.

En experimentos llevados a cabo con ratones, los compuestos fueron utilizados como parte de una vacuna y lograron mejorar "ampliamente" la respuesta de la inmunización, incluso con infecciones que de otra forma hubieran sido letales.

Tal como expresan los científicos en la revista Nature Materials, los compuestos serán adaptados próximamente para utilizarlos con humanos.

Preparación inmune

Actualmente una vacuna involucra la preparación del sistema inmune para que éste pueda reconocer a una bacteria o virus particular y sea capaz de atacarlo rápidamente cuando ocurre una infección.

Además de contener una versión desactivada o debilitada de la bacteria o virus que se desea atacar, muchas vacunas contienen los llamados "adyuvantes", que son sustancias que ayudan a mejorar la respuesta del sistema inmune.

El equipo de Duke basó su estrategia en el mecanismo natural del sistema inmune que involucra un tipo de células llamadas mastocitos, ubicadas en la piel.

La función de estas células es combatir infecciones y para ello se comunican de forma directa con los ganglios linfáticos liberando unos compuestos (pequeñísimas partículas) llamados gránulos.