Luego de varias acciones de calle, en la mañana de ayer, los vecinos del urbanismo del municipio García aplaudieron la intervención de la GNB para terminar con la invasión de 56 viviendas de la manzana número ocho.

17 abr, 2012 | Mediante pancartas, consignas y evocando el derecho a la propiedad, los vecinos y víctimas de la invasión en Las Marites salieron a la avenida Juan Bautista Arismendi a exigir el desalojo de todas las personas que ocuparon 56 viviendas.

Los vecinos del urbanismo, involucrado en una estafa inmobiliaria, protestaron desde las 5:30 a.m. en la principal arteria vial de Nueva Esparta para ejercer presión y lograr la intervención de la Guardia Nacional (GNB) en el desalojo de los invasores de la manzana 8 del conjunto residencial del municipio García.

La invasión, acto condenado por la constitución, inició la mañana del sábado. Ante las presiones de los propietarios, el lunes una parte de los 156 invasores fue desalojada por la GNB, el resto salió por sus medios. Luego de lograr la desocupación, los vecinos pidieron a las autoridades mayor seguridad para la propiedad privada.

Según Nora Cardona, residente de Las Marites, los vecinos estuvieron al frente de las negociaciones con los funcionarios de la GNB por ausencia de una orden de la Fiscalía.

Aun cuando los funcionarios se encargaron de sacar a los ciudadanos en camiones de la GNB, algunos invasores escaparon por un boquete que abrieron en las paredes de la urbanización.

Ventura Guerra, propietario de una de las 56 casas involucradas en el acto delictivo, dijo que su vivienda no estaba ocupada porque aun está en construcción. Guerra y cientos de personas en la entidad fueron víctimas de las llamadas estafas inmobiliarias.

Guerra aseguró que todas las viviendas tienen propietario y que la acción cometida por los invasores es una ilegalidad.

Posición del Psuv

Rosario Pacheco, integrante del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), rechazó los actos de invasión cometidos en Las Marites y ratificó que el Ejecutivo Nacional trabaja para resarcir la deuda social que tiene con el pueblo en materia habitacional. La dirigente política considera que la acción “fue orquestada desde la oposición como parte de la agenda de miedo y terror para empañar la acción de la revolución en el estado”.

Fuente: sol de Margarita