Por: Carla Yánez .-  Un extraordinario lugar que bendice una vez más a esta tierra caribeña es  la isla La Tortuga que forma parte de las Dependencias Federales y se encuentra bajo la administración de la Armada Nacional. Este atractivo natural, ubicado al sur del mar Caribe, es la segunda isla más grande después de Margarita (estado Nueva Esparta). Un territorio virgen que regala al visitante paisajes inolvidables.

Quien arribe a La Tortuga, desde los puertos Carenero y la Pérgola Marina, en Higuerote, estado Miranda, se enamorará de la gama de tonos azulados que desprende las aguas del Caribe. Ante ello, se activará los sentidos al visualizar una línea blanca de arena en el horizonte que marca la llegada al paraíso venezolano. Desde el aire se observa la amplia extensión de vegetación xerófita que hace simbiosis perfecta con el mar.

Y es que al llegar a este exuberante rincón del país se puede regocijar con la tranquilidad, paz y las ricas aguas que envuelven esta isla. Aguas con una temperatura natural, fina arena que con el reflejo del intenso sol te broncea la piel sin querer, lo que es recomendable en todo momento el protector solar.

Isla La Tortuga regala 156 kilómetros para explorar su fauna y flora. Además de inolvidables atardeceres con colores intensos que no se pueden dejar de fotografiar para un bello recuerdo. Cuenta con manglares, arrecifes, islotes y cayos. Actualmente en Cayo Herradura está permitido el establecimiento de campamentos turísticos. Prestadores de servicios turísticos brindan el servicio de carpas, alimentación e insumos básicos para su estadía. En esta zona se puede observar el fenómeno natural que es el hilo de unión de dos tranquilas playas, posee un emblemático faro al borde de este cayo.

Punta Delgada es otra de las bondades naturales que cuenta la encantadora isla La Tortuga. Se encuentra a veinte minutos de Cayo Herradura, su agua es azul turquesa. Este sitio cuenta con una pista de aterrizaje para avionetas. El turismo que se ofrece es aventurero y ecológico. El Gobierno Nacional, a través del Ministerio del Poder Popular para el Turismo (Mintur) y la empresa privada desarrolla un centro turístico basado en la preservación y conservación de sus activos naturales y que va  a potenciar la dinamización de la economía del país.

A estos cayos se suman Los Tortuguillos, Bajo de los Palanquines, Cayo de Ño Martín, Islote El Vapor y Cayos de Punta de Ranchos. Igualmente se despliegan bellas y exuberantes playas como; Caretta Verde y Carey, donde suelen desovar las tortugas marinas.

Una vuelta al pasado
Esta dependencia federal venezolana guarda entre sus magníficos paisajes semblanzas que datan  de hace cinco siglos. Cuando en 1499 Alonso Ojeda y Américo Vespucio, junto con el cartógrafo Juan de La Costa descubrieron este enigmático lugar. Debido a la gran cantidad de tortugas que observaron a su llegada estos tres pioneros la bautizaron La Tortuga.

Ancestral yacimiento de sal que era explotada por españoles y holandeses que continuamente se disputaban su propiedad. Antes de la época de la colonización, el lugar era visitado por aborígenes en busca de peces, sal y tortugas para su alimentación.

Más tarde en el siglo XXI, a finales del 2002, el Gobierno Nacional envió un equipo de profesionales e investigadores, quienes forman la Fundación La Tortuga. Esta alianza originó estrategias para elaborar estudios destinados a determinar la  caracterización biológica y oceanográfica de esta Dependencia Federal.